30 mayo, 2003

Alcanza con estar medianamente atento a los medios de comunicación: hay un nuevo héroe en la ciudad. Ni X – Men, ni Batman ni Piñón Fijo: desde que entró en funciones, Super K ha volado aquí y allá, a Campo de Mayo a descabezar milicos represores, a Entre Ríos para consolar a los maestros, a Formosa a darle una mano a un gobernador necesitado de reelecciones indefinidas, a donde sea necesario ir a posar sus ojos de rayos torcidos pero efectivos. Antítesis de Fernando De La Siesta, que ni siquiera tiene demasiado claro por qué Super K está viviendo en la Rosada, este nuevo personaje argentino parece dispuesto a la quijotada permanente, hasta que le dé la nafta (y parece que de eso tiene bastante) o hasta que la LIME –Liga Malvada del Establishment– le ponga piedras en el camino. Mientras tanto, he aquí algunas de las proezas que Super K llevará a cabo en los próximos días.

· En una de esas movidas que suele ejemplificarse como “matar dos pájaros de un tiro”, pagará la deuda externa argentina no con el hambre del pueblo, sino con los patacones, quebrachos, lecops, cecacor y demás bonos provinciales que prometió eliminar. Y el FMI tendrá que arreglarse con esos papeluchos.
· Enterado de que, gracias a aquel lema menemista de “ramal que para, ramal que cierra”, infinidad de localidades del interior están desconectadas de todo, Super K se ofrecerá a llevar a cococho a todo argentino de bien que necesite llegar allí donde el ferrocarril es solo un recuerdo.
· Ante un nuevo riesgo de quiebra económica y futbolística, se encargará de la dirección técnica del Racing Club de Avellaneda, y lo sacará campeón del Apertura, la Copa Libertadores, la Intercontinental, la Mercosur y los Torneos Juveniles Cristinita.
· En un operativo más que relámpago, ocupará las Malvinas y las reclamará para la Argentina, y conseguirá que los británicos ni siquiera protesten.
· Tras un curso veloz de nutricionista, hará que Diego Armando Maradona baje 30 kilos, se ponga en forma y vuelva a vestir la 10 de la Selección para arrasar en Alemania 2006.
· Aplicando sus rayos oculares, cavará los túneles necesarios para que las líneas de subte de Aires Dudosos lleguen a su máxima expresión. Las líneas quedarán algo torcidas, pero los usuarios igual quedarán satisfechos.
· En una breve entrevista con George W. Bush Jr., lo convencerá de que no es necesario andar tirando bombas por todos lados, y ambos mandatarios saldrán del Salón Oval abrazados, fumándose un cañete y entonando a voz en cuello “All you need is love”.